domingo, 9 de octubre de 2016

THE VELVET UNDERGROUND - WHITE LIGHT / WHITE HEAT

Creo que este grupo ha sido uno de los más influyentes de la historia.
Y lo creo porque su sonido sigue siendo convulsivo y moderno después de casi medio siglo.
Este segundo trabajo fue el último en el que estuvo John Cale, que abandono, (o lo hicieron abandonar), por las diferencias por todos sabidas con Lou.
Se publicó en el año 68.
Aquí ya no estaba tampoco Nico y Andy tampoco los tutelaba.
El disco seguía investigando con el ruido, con el Rock, con el Avant Garde.
En definitiva, seguían experimentando con el sonido, incluso con el caos sonoro que estos chicos eran capaces de provocar.
Un buen ejemplo es el último tema de diecisiete minutos que es una verdadera gozada. Es Sister Ray.
La batería sólida marca el ritmo para que el resto del grupo suelte sus exabruptos sónicos con sus intrumentos por encima. Un tema caótico pero me atrevería a decir que son de esos imprescindibles dentro de la carrera del grupo para poder observar todo el potencial que tenían, y también ver hacia donde querían ir, lo que querían buscar.
Hay momentos para el Rock con sonido más "tradicional y convencional" como es la estupenda White Light/White Hear.
The Gift es realmente una pasada. Un bajo y una batería inamovibles y demoledoras son la base para que Lou recite sus versos. Una guitarra con mucho de Psicodelía, y también ruidista y distorsionada, pulula com por el medio de la nada.
Un temazo exquisito con el que te das cuenta que iban por delante de muchos otros grupos.
No eran convencionales estos chcios.
Lady Godiva´s Operation vuelve aparantemente por canales más apaciguados. Y digo aparentemente, porque el tema es pura sonido distorsionado y casi noise. Y también da la sensación de mal grabado, como si fuera casi maqueta. La voz se superpone alguans veces, aparece casi con distintos volúmenes, con distintas presencias. Y al final aparacen ruidos electronicos. Sí, electrónicos. porque esos sonidos salían de aparatos eléctricos.
Here She Comes Now es la más tranquila de todas y la que más nos puede recordar a las que cantaba Nico en el primer disco.
La más tradicional de toda, aunque los sonidos que se puede oir de fondo  no lo sean tanto.
I Heard Her Call My Name es pura rabia y fuerza.
De base de Rock clásico, la VU hacen que para nada el tema tenga un sonido clásico. Los punteos distorsionados.
La batería parece que tiene el sonido motorik, tan propio de el Krautrock. Además también hay mucha actitud Punk, años antes de que el estilo, el movimiento y el sonido como tal saliesen a la luz.
Así que, si miramos cuando se edito, (en el 68), y todo lo que contiene de novedoso el sonido de VU aún hoy en día, pues que queréis que os diga.
Fueron muy grandes e influyeron enormemente como pocos,  aunque nunca se comiera un colín como grupo.

JEAN MICHEL JARRE - MAGNETIC FIELDS

Tengo que reconocer que a Jean Michel lo tengo bastante olvidado por este blog.
Su obra no me gusta totalmente, pero los momentos inolvidables que me ha hecho pasar con algunos de sus discos no me los quita nadie.
Este fue el primero que tuve de él en formato cassete.
Ya empezaba yo a ser degustador de sonidos electrónicos, tal vez no tan experimentales o "distintos" para mí por aquellos años, pero sí que me agradaba escuchar esos sonidos que salían de "las máquinas".
En la radio sonaba el maravilloso Magnetic Field part. II, un tema que me atraía a más no poder.
Así que una amiga mayor que yo, me lo regaló.
Como digo, más habituado más los sonidos más Tecno Pop, reconozco que el tema primero que ocupa toda la primera cara, me desconcertó en un principio.
No estaba yo acostumbrado a temas de tan larga duración. También es cierto que siempre escuchaba más la segunda cara, pero no dejaba de dar una  escuchadita al tema.
Y como siempre hay que dar una oportunidad, resulta que el tema me fue ganando en cada escucha.
Se podría dividir en tres partes. Una con electronica más "bailable" al principio. Una segunda cara más ambiental y cósmica que me gusta más ahora que la primera vez, y una tercera que sigue por la senda del primero en cuanto a que los sonidos son, no más bailables, sino mas rítmicos.
Estupendo esta primera cara que no tiene desperdicio.
La segunda cara empezaba con la comentada parte dos. Más rítmica de lo nomal en Jean- Michel, y sin dejar de ser él la hacía muy bailable y fascinante.
La tercera parte empieza como si estuviésemos en una estación de trenes interplanetaria y acabásemos de llegar. Y da la sensación de que la estación estuviese en algún lugar de Africa en el siglo XXV. Sonidos étnicos de fondo, agua sonando y creando atmósferas tranquilas junto con los sintetizadores. Estupenda.
La parte cuarta también salió como single.
Las máquinas marcan el ritmo y una melodía sencilla pero penetrante va dando forma a un tema que suena muy reconfortante, un poco triste por momentos, pero que te relaja y te hace esbozar un sonrisa de efímera felicidad cuando suena. Eso sí, el final suena como si estuvésemos salieron de la anterior estación de trenes.
Y es que todos los temas están entrelazados.
La parte quinta y última, subtitulada The Last Rumba, pues la verdad es que suena a eso, a una rumba.
Sinceramente sobra. Suena a teclado de el gitano con la cabra y aunque la melodía no es fea, pues como que desentona.
No será el mejor disco de este señor, que tiene una extensa obra, pero a mí es un disco que me sigue gustando.